sábado, 8 de noviembre de 2014

La sorpresa de lo póstumo


La postumencidad* de algunos textos de algunos autores es una plaga cada vez más común. Cierto, no sin estupefacción he visto obras post mortem que al igual que un conejo sacado del sombrero de algún mago mercachifle, de la nada, sin explicación alguna y por arte de magia aparecen libros listos para venderse al público, solo que en vez de sombreros estos cuentos, novelas y poemas nacen de manuscritos hallados en baúles refundidos en el olvido o en papeles que se salvaron de la basura o se rescataron de ella y hasta en carpetas sospechosamente encontradas en archivos desconocidos de computadoras personales de los finados. Lo juro, no soy desconfiado, pero desconfío.
He visto la noticia de que el sello Alfaguara ha publicado la novela póstuma de Saramago “alabardas”  (que en realidad se llama “alabardas alabardas, espingardas espingardas”). Hay que precisar que José Saramago al momento de fallecer dejo inconclusa la novela,  escribiendo los tres primeros capítulos, entonces como diablos es que esta publicada? muy simple, la viuda de Saramago, Pilar del Rio no tuvo mejor idea que contratar a su compatriota Fernando Gomez Aguilera dizque poeta español quien junto al periodista italiano Roberto Saviano tuvieron la sacrílega misión de completar la novela emulando el lenguaje y estilo  del escritor portugués guiándose por supuestas notas dejadas por el autor tentando el posible final de la obra; para renegar? Claro que si, pero mas para llorar. La viuda afirma que fue su obligación moral para con los seguidores de Saramago publicar la obra, yo afirmo como seguidor veterano de Saramago que bien podía eximirse de tal obligación y dejar las cosas como muy bien estaban, pero imagino que las regalías por derechos  de autor del finado y de las cuales ahora es beneficiaria son buenos motivos para dejarse embriagar por aquel repentino impulso moral. Tampoco soy injusto, en defensa de los herejes puedo reconocer que al menos tuvieron la decencia de decir desde el principio que la novela estaba inconclusa y que con una ayudadita  mercenaria y al caballazo se había terminado la obra, al menos no nos mintieron.
Lo de Bolaño si es francamente detestable, en el 2003 era conocido que tenía terminada la obra 2666, y que andaba en negociaciones con Anagrama para su publicación cuando lo sorprendió la muerte, así que no es extraño que esta fuera publicada de manera póstuma, aunque si hay algunos hechos posteriores dignos de sospecha; que el editor español Ignacio Echevarría fuera el único autorizado por la viuda de Bolaño (Carolina López) para revisar los manuscritos,  cuadernos y la computadora que el escritor y poeta usaba para transcribir sus textos no tiene nada de extraño si uno tiene la mente limpia, lo raro es que en el 2008 el agente literario  estadounidense Andrew Wylie, intimo amigo de Echevarría  anunciara que tenía en sus manos la novela inédita “El tercer Reich”  hallada una parte en un archivo muy oculto (tanto que no lo descubrieron sino casi cinco años después de la muerte del autor) en la computadora de Bolaño y la otra parte en hojas sueltas escritas unas a mano y otras a máquina, anuncio que tomó por sorpresa a todos incluido al más más de Anagrama, Jorge Herralde quien publica en la actualidad las ediciones de Bolaño, y quien hasta ese momento no sabía ni pio del tema, pero que prefirió no preguntar al respecto ni se hizo problemas para publicarla el 2010 después de una dura negociación con Carolina López. Pero ahí no queda la cosa, poco tiempo después el gringo Andrew Wylie hizo público que entre Él e Ignacio Echavarría tenían listas para publicar las novelas inéditas “Los sinsabores del verdadero policía” y “Diorama”, eso sin tener en cuenta que en el año 2007 Echevarría ya había publicado de manera póstuma el libro de cuentos “El secreto del mal” y  en 2004 el libro de ensayos “Entre paréntesis”. Yo me pregunto, si el tipo está muerto de donde salen tantas obras? Dicho esto y como quien adorna el pastel el año 2013, a  10 años  de la muerte del escritor la flamante viuda inaugura una exposición llamada “Archivo Bolaño 1977-2003” en la que anuncia campante que se exhibirán 14.000 (si, catorce mil) paginas, 84 libretas y tres novelas más, todas inéditas entre las que figuran los títulos “DF. La paloma tobruck” la antes anunciada “Diorama” y “El espíritu de la ciencia ficción” pero que lo hará poco a poco, para “no saturar el mercado con las obras de Roberto”.   Algunos poetas  añejos del Movimiento Hora Zero  con quien Bolaño tenía una cercana amistad y quienes lo direccionaron para que fundara el infrarealismo coinciden en que mucho de lo ahora publicado a nombre de Bolaño es obra de cualquier otro menos de Él y deslindan de los descomunales archivos reveladores encontrados en su computadora. La pregunta lógica es, pueda que sea Bolaño el autor de todo ello? Es razonablemente posible, pero vayamos a los datos históricos, Bolaño antes de tener su primera computadora, escribía a mano y luego usaba la máquina de escribir para transcribir lo ya corregido, ahora bien, para cuando hubo muerto, su círculo cercano conocía que el escritor  tenia a la mano más o menos 350 cuartillas escritas y algunos otros archivos en su pc, cuando se trata de sumar, restar, multiplicar y hacer regla de tres simple, me da fiebre de 45 grados, pero delirando entre la calentura y la razón puedo darme cuenta que esos archivos ocultos y esas páginas mecanografiadas no pueden convertirse en varias novelas de más de 500 páginas ni en infinitas compilaciones de cuentos inéditos. Mi buen amigo Riguel, quien me hizo conocer la obra de bolaño allá por el año 2005, opina que la ambición y la poca vergüenza han necrofilizado la literatura de Bolaño, en la que sus herederos y agentes han hecho el papel de frankenstein,  uniendo un poco de aquí, con  otro tanto de allá e inventándose otro tantito por allí, dando como resultado algo que puede tener forma, pero que ciertamente no convence,  desmerece e insulta la memoria del escritor, podemos sospechar pero la verdad nunca la sabremos.
 Caso aparte y solo para el vicio, es de mencionar que para aquellos que hemos cantado, llorado y nos hemos embriagado oyendo los vinilos de Hector Lavoe, su mejor disco es precisamente el aclamado  y póstumo  “Hector Lavoe Live” y claro, la historia detrás del disco hace más suprema la obra:  Lavoe canta con su orquesta, nadie sabe con certeza el lugar ni cuando,  solo se deduce que pudo ser en 1978, año para el cual El Cantante de los Cantantes ya se había enviciado, recuperado, recaído , rehabilitado y vuelto  a caer mil veces a su adicción a ciertas drogas, alguien tuvo la genial idea de grabar de manera clandestina el concierto y quizá por olvido o pereza la mantuvo guardada hasta mediados de los 90s en que, de manera anónima llego a la disquera Fania Records que también la mantuvo olvidada algún tiempo hasta que Jerry Masucci amo y señor de la disquera  lo encontró y le gustó tanto que mando a que se remasterizara y como quien no quiere la cosa para gozo de millones en 1997 salió el disco con una hermosa caricatura de Lavoe como portada. Ahora bien, alguien siquiera podría insinuar que no es la particular voz de Lavoe la que se escucha? Habría que ser blasfemo, que se esta lucrando con ello? puede que si, pero nos trae al cantautor en su forma mas pura y original. Que diferente con la literatura, mientras en la música la historia detrás de lo póstumo enriquece y hace más sublime lo publicado, en la literatura la empobrece, la hace vil y sospechosa.
                                   Cisco de Melk

*termino inexistente, pero entendible